martes, 11 de agosto de 2009

Un Afrodescendiente Ruso

06 de diciembre de 2008

No es inusual encontrar, en la sociedad globalizada actual, personas cuyos orígenes se encuentran lejos del país en el que viven. Hoy en día hay afrodescendientes en todos los continentes y en muchos países en los que hasta hace poco la población no tenía ni rastros de genes africanos (recientes, al menos. Recordemos el hecho de que la especie humana proviene de África). Incluso en un país tan tradicionalmente “blanco”, como Rusia, al menos en el extremo occidental (europeo), hay casos recientes de matrimonios de mujeres rusas con hombres africanos que han dado como fruto hijos e hijas que se crían como rusos y representan a ese país en eventos internacionales. Es el caso de la cantante rusa Alice Edun, de padre nigeriano, o de Nkeirouka Ezekh, integrante del equipo ruso de curling que participó en los olímpicos de invierno de Turín (Italia) en 2006, también hija de padre nigeriano y madre rusa. Pero encontré un caso curioso de un ruso afrodescendiente que se destacó en la corte de Pedro El Grande en el siglo XVIII.

Abram Petrovich Gannibal (1696-1781) fue un príncipe africano que llegó a ser Mayor-General, ingeniero militar y gobernador de Reval, un área en lo que hoy es Estonia. ¿Qué hacía un afro en una corte europea en el siglo XVIII y además destacándose en posiciones de poder en una época en la que de haber estado en Inglaterra, España, Portugal o cualquier país americano habría sido esclavizado o asesinado por el color de su piel?

Este hombre de origen etíope, según algunos historiadores, y camerunés, según otros, al parecer fue raptado en su temprana infancia por traficantes de esclavos árabes que lo llevaron a Constantinopla, capital del imperio Otomano. Se dice que los hijos de nobles eran entregados a oficiales de abolengo de aquel imperio. Un año después, cuando Gannibal tenía unos 8 años, el embajador ruso lo llevó a Moscú por orden de Pedro El Grande, pues contar con niños “negros” entre los miembros de la corte era la moda entre la realeza europea. Así es como Gannibal, cuyo nombre africano se desconoce, llega a una de las más poderosas cortes europeas de la época.

Gannibal fue enviado a Francia para continuar con la educación iniciada en Rusia. En París estudió idiomas, matemáticas, ciencias y artes de guerra. Entabló amistad con personajes como Voltaire y el Barón de Montesquieu. Luchó junto a las tropas de Luis XV contra Felipe V de España llegando al rango de capitán. Fue entonces cuando adoptó el nombre ‘Gannibal’, la versión rusa de ‘Aníbal’, en honor al general cartaginés que puso en jaque al imperio romano alrededor del año 200. Regresó a Rusia después de pasar unos años en Francia, pero fue exiliado en Siberia en 1727, para ser perdonado 3 años después gracias a sus conocimientos en ingeniería militar. En 1741 se convirtió en un miembro destacado de la corte cuando Isabel, hija de Pedro El Grande, ascendió al trono. Llegó al rango de Mayor-General y fue enviado como gobernador a Ravel, actual Estonia, donde residió por 10 años. Un tiempo después le fueron asignadas tierras en la provincia de Pskov, cerca a la actual frontera con Estonia a donde se retiró para morir en 1781.

Abram Petrovich Gannibal, se casó dos veces, la primera con una mujer griega quien lo odiaba (matrimonio forzado) y la segunda con una noble de origen escandinavo y alemán. Tuvieron 10 hijos y entre sus descendientes se cuentan el poeta ruso Alexander Pushkin además de varios aristócratas británicos.

Me pregunto si la historia rusa ha empalidecido a Gannibal, así como la historia de América a empalidecido a personajes como Simón Bolívar (no por nada algunos lo llamaban “el Zambo”), o a los afrodescendientes Juan José Rondón y José Prudencio Padilla. Todas las representaciones que he visto de ellos son bastante europeizadas. Pero al menos sé que se reconoce su origen africano y me parece importante resaltar que a pesar de su origen y el color se su piel tuvo las oportunidades necesarias para destacarse como militar e ingeniero, y aportó un toque de diversidad genética a una nación a la que esto no el venía nada mal.

Me parece importante resaltar que los afrodescendientes no sólo hemos tenido alguna influencia histórica en los países donde nuestros abuelos fueron sistemáticamente esclavizados, sino también en lugares como Rusia, en donde estamos acostumbrados a ver gente de origen eslavo en una tierra donde hasta hace unos milenios tener la evolución hizo disminuir la cantidad de melanina en la piel de los habitantes de la región.

Si los rusos pueden aceptar esta parte de su historia, ¿porqué no podremos nosotros hacer lo mismo y darle el crédito merecido a quienes haya hecho aportes a la historia y el desarrollo de nuestra Colombia? Ahí tenemos tarea para rato.

Ann Arbor, Michigan, E.U., 06 de diciembre de 2008
Para Barûle Gazette

1 comentario:

Lycus Sylla dijo...

mas ratas en el mundo lo que nos faltaba mas negros en el mundo , a este paso de reproduccion negra a nivel mundial se dara el mismo caso que en africa tontos de piel negra dirigiendo paises ya veo porque paracko obama digo osama no sabe dirigir bn los asuntos tanto mundiales como de su pais niggas fuera colombia libre de ratas negras sin cerebro